El calor es muy importante para la salud de tu animal, sea cual sea su edad. Esto es especialmente cierto si tu mascota es mayor y tiene problemas articulares o bronquiales. Si tu gato está resfriado, es un cachorro o ya es mayor, necesitas encontrar la mejor opción para una cama para gatos con calefacción. A continuación te damos algunos consejos para no cometer errores a la hora de comprar para tu mascota.
El control de seguridad es muy importante. Si el calentador es eléctrico, debe tener un cable colgante o estar bien escondido debajo de un cojín. Presta atención a esto, especialmente si tu gato aún es joven y juguetón. Hay almohadillas térmicas que funcionan con baterías, con microondas o activadas por una reacción química, y vienen con un gel especial que no requiere cables ni electricidad.
El material para una cama para gatos con calefacción debe ser cómodo, suave al tacto y suave. Busque camas hechas de telas duraderas y de buena calidad. Asegúrese de que su cama tenga fundas lavables a máquina para facilitar la limpieza. Se recomienda que no sea demasiado grande. Para que sea más cálido, debe tener la forma de una cuna amurallada y también brindar protección contra el frío. Las camas sin paredes o más anchas son mejores cuando hace calor porque permiten la circulación del aire.
Otra gran opción es una cama para el radiador . Hay un marco para colgar en la parte superior del calentador. Suelen ser suaves, esponjosos y tienen forma de hamaca, por lo que no llevan acolchado. Es fácil de lavar y no consume electricidad, lo que lo hace más económico y respetuoso con el medio ambiente. También tienen la ventaja de una posición alta que les gusta a los gatos porque pueden controlar todo el entorno y sentirse más seguros. Para los gatos mayores, es útil elevar una silla o un banco para que puedan acceder a la hamaca sin saltar del suelo.
Aunque no tengas calefactor, puedes elegir qué hamaca poner en la ventana . Esta cama se utiliza en invierno cuando el sol entra por las ventanas de la casa, pero las ráfagas de frío no deben pasar por ella. En verano, puedes cambiarlo a un color oscuro más aireado.
Algunos gatos prefieren dormir bajo una manta que les proporcione calor mientras evitan la mirada de los demás. En este caso, elige una manta ligera, suave y fácil de lavar. Puedes colocarlo directamente sobre un cojín para gatos o sobre el sofá, la cama o donde quiera Michi.